MANIFIESTO de la Plataforma LA MÚSICA EN VIVO ES CULTURA - abril 2011

La riqueza que supone para Granada su variedad de manifestaciones musicales está fuera de toda duda; pero las dificultades para hacer música en vivo en esta ciudad están aumentando cada día que pasa. Ya sabemos que el problema de fondo es una legislación general que obstaculiza los conciertos con exigencias excesivas al aplicar requisitos de salas de fiestas a todos los locales; pero la rigidez o flexibilidad de la aplicación depende de cada ayuntamiento, y no cabe duda de que el de Granada tiene una creciente obsesión por perseguir cualquier manifestación musical que se escape de su control.
Se acumulan las denuncias y cuantiosas multas contra locales que programan conciertos; en esta época de crisis suponen una estocada para los negocios, que incluso acaban en cierre. Por supuesto que la realización de una actividad cultural como los conciertos debe ser compatible con el derecho al descanso de los vecinos, se trata de aplicar el sentido común: se está multando a locales por el simple hecho de hacer música sin la licencia específica, no por molestias causadas por el concierto (en muchos casos se les visita a las 11 para darles la denuncia). Esto produce un miedo generalizado en los locales al “Me puede tocar a mí”.
Lo mismo se puede decir de hacer música en la calle: la arbitrariedad de que te dejen, o no, actuar en una plaza, logra que todo el mundo esté pendiente de un hilo, dócil a la concesión (o no) del permiso que exige la Ordenanza “de la Convivencia”.
Se supone que este recrudecimiento del control en época pre-electoral se hace con la intención de mostrar a los votantes su “batalla contra el ruido”, pero en realidad es una excusa para intensificar un control que está llevando al progresivo deterioro del tejido cultural (y social, turístico, económico, de vida estudiantil…) que supone la música en vivo para una ciudad como Granada. Además de ser una alternativa creativa al botellón, le da vida a las calles (incluso son más seguras que estando desiertas) y mantiene puestos de trabajo en esta época de crisis. También hay que recordar los numerosos artistas granadinos, ahora reconocidos, que comenzaron su carrera actuando en los locales de la ciudad: Los Planetas, Lapido, Eskorzo, Lagartija Nick, Son de Nadie, Lori Meyers… y no solo músicos, también Santi Rodríguez, por ejemplo, empezó como artista en los bares de Granada.
Para hacernos oír y frenar esta persecución se ha constituido esta Plataforma, como punto de encuentro de las personas que hacen música y las que la disfrutan:
LA MÚSICA EN VIVO ES CULTURA.

Tenemos un grupo en facebook: “La música en vivo es cultura”
y un blog: http://lamusicaenvivoescultura.blogspot.com